13/12/07

16 Septiembre Anécdota de la 1ª noche en Pucahuayco:

En la cena: Maria (cooperante de Zaragoza). Tengo un ratón en el habitación que no me deja dormir. 1er.despertar: Un ruido bajito al fondo de la habitación. Ris Ris… Pienso: Ya tengo yo al ratón. 2º despertar: Suena la sirena de la alarma un rato. No se oye nada… Pienso: deben de estar deambulando por ahí algunos de las fiestas. 3er. Despertar: ¡Pum! Un disparo de escopeta. Prácticamente al momento un petardo o un tiro de pistola. Los perros ladran… vuelve el silencio. Al rato: Alguien silva varias veces como fuera de la finca… y si me hacen salir así… Me pongo los pantalones del chándal y me meto en la cama. La imaginación se dispara. Estarán tomando la finca… Solo los perros protestan ante el miedo… Mas tarde: El ratón esta haciendo mucho ruido, es el papel de las galletas… Se las debe estar comiendo… Hago ruido.. se esconde y guardo las galletas. A las 6 menos cuarto ya está amaneciendo. Abro las cortinas al escenario de movida nocturna y se vislumbra la tranquilidad y la paz del sol que está saliendo. Hago un poco de gimnasia y me ducho. En el desayuno: María la de Zaragoza ha estado devolviendo porque no le sentó bien el bizcocho de chocolate y además no ha dormido por la movida nocturna. Maria del Angel la Ecuatoriana no se ha enterado de nada (por lo visto sonó 3 veces la sirena). Finalmente cuando abrimos la capilla por la mañana allí no había nadie…